El fondant, la mejor manera para cubrir y decorar tartas


cómo usar el fondant para decorar tartas

El fondant es una pasta, equiparada muchas veces a la plastelina, que es comestible y se usa para cubrir tartas y pasteles. Se suele usar más como decoración que como ingrediente en si, puesto que para algunos no resulta muy deliciosa, aunque existe fondant de sabores como el chocolate. No obstante da un toque elegante a las tartas, tanto usado como de cobertura como para realizar adornos de repostería.

Aunque la utilización del fondant es muy popular en Estados Unidos, lo cierto es que su origen tuvo lugar en Europa. Se atribuye a la época de María Antonieta, cuando se casó con Luix XVI. El primer fondant de la historia se hizo a partir de un almíbar muy denso, realizado a base de agua, azúcar y glucosa.

No obstante, el fondant como todos lo conocemos, como una masa que se estira y sirve para cubrir cosas, surgió en Inglaterra. Allí lo empezaron a emplear para cubrir tartas de frutas y conservarlas frescas en su interior.

A partir de este momento la utilización del fondant en repostería se ha extendido mucho. Primero por las propiedades de conservación que hemos comentado, después porque un fondant de un color liso proporciona al pastelero todo un lienzo en blanco en el que poder decorar y conseguir acabados espectaculares.

decorar tartas con pasta fondant

Pacharawan || Shutterstock

A día de hoy puedes encontrar muchos tipos de fondant diferentes, fondant líquido, fondant para estirar o incluso fondant de sabores, entre los que encontramos el aclamado fondant de chocolate.

¿Cómo hacer fondant de chocolate?

El fondant de chocolate es uno de los más ricos que existe, por su sabor. El sabor del chocolate lo hace delicioso y su color, junto al acabado de la cobertura del fondant, brinda la oportunidad de hacer tartas espectaculares. Existen varias maneras de realizar fondant de chocolate casero, pero la receta de fondant de chocolate más conocida es con nubes (o malvaviscos), chocolate y azúcar.