Muchas personas cuando llega el verano, con el calor que este le sigue, tiende a dejar de lado el chocolate. Esto es un gran error, ya que estaríamos perdiendo los numerosos beneficios del chocolate, además de su delicioso sabor. Por otro lado, los que no pueden eliminar el chocolate de sus vidas durante el verano, tienden a comerlo sólo en helados o postres fríos. Pero, ¿y las tartas, los crepes y las tazas de chocolate caliente? Sí, ha leído bien, chocolate caliente y verano en una sola frase. Y, es que, comer chocolate caliente en verano es mucho más beneficioso de lo que te crees. Por ello queremos hablarte de por qué debes disfrutar de una buena taza de chocolate caliente en verano.
¿Por qué debes tomar chocolate caliente en verano?
Sí, sabemos que con sólo pensar en comer chocolate caliente en pleno verano te entra calor y te vienen los sudores. Pero créenos si te decimos que disfrutar del chocolate en verano tiene muchos más beneficios de lo que imaginas. ¡Y te lo vamos a demostrar!
Los beneficios del chocolate
El cacao es un super alimento, y por tanto, comer chocolate aporta muchísimos beneficios a nuestro organismo. El más destacable, y demostrado, es su gran contenido en antioxidantes, que ayudan al buen estado de nuestras células. Estos antioxidantes también resultan muy beneficiosos para el estado de nuestra piel, por ello el chocolate es muy usado en tratamientos de belleza.
Por otro lado, el theobroma del chocolate estimula la segregación de endorfinas en nuestro cerebro. Esto se traduce en que el chocolate tiene la capacidad de hacernos felices, de cambiar nuestro estado de ánimo.
Además, ¿nos crees si te decimos que el chocolate evita las caries? ¡Pues es así! Lo del chocolate y las caries es un mito, lo cierto es que sólo produce caries si el chocolate tiene un gran contenido de azúcar o lo limpiamos nuestros dientes de manera correcta.
Las comidas calientes hacen sudar
Las comidas calientes, como en este caso una taza de chocolate, nos hacen sudar. Nuestro cuerpo suda de manera involuntaria con el fin de regular nuestra temperatura corporal, tanto interna como externa. Por lo que ingerir comidas calientes hace que sudemos y nos sintamos más a gusto con la temperatura ambiente. Al igual que se recomienda tomar baños tibios o calientes cuando se viaja a lugares con climas extremadamente cálidos por exactamente lo mismo. De esta manera nuestro cuerpo toma medidas para regular nuestra temperatura.
El problema es que en la cultura española esta práctica no está muy bien vista, no encontraremos a ningún madrileño comiendo callos en un chiringuito un día de verano. Pero, párate a pensar, esto no nos parece tan raro si lo vemos en otras culturas. En otras partes del mundo, como la India o Tailandia, es muy usual ver a sus lugareños disfrutando de sopas calientes en plena calle al sol. En este tipo de culturas, en las que lidian con temperaturas extremas, no está mal visto sudar, siempre y cuando sea porque nuestro cuerpo lo necesita.
Así pues, a parte de sus numerosos beneficios, esta es una de las principales razones de peso por las que deberías comer chocolate caliente en verano. Porque aunque no te lo parezca, te ayudará a estar mucho más a gusto y a combatir el calor.
